Literalmente se traduce como “instrumento hueco”.
Un elemento importante de la vida social de los santal es la música, la danza y el canto. Se toca con un arco, a la manera de un violín, pero en posición vertical. Generalmente va provisto de una sola cuerda.
Una leyenda santal nos cuenta la historia de siete hermanos que mataron a su única hermana con el fin de comérsela. Sin embargo, el más joven que sentía un especial cariño por ella, no pudo tragar el trozo que le correspondió. Lo enterró junto a un hormiguero y en ese lugar creció un magnifico árbol, que dejaba oír un son melodioso. Un yogui, que venia frecuentemente a recoger flores, oye esta melodía y corta una de sus ramas para realizar el primer dhodro banam.
Era utilizado por los yogui mendigos, que se desplazaban de aldea en aldea para pedir la caridad. Según otras fuentes, los intérpretes de este instrumento eran semiprofesionales que venían de lejos, invitados para las festividades.