Décima escrita por Violeta Parra (1917-1967) para describirlo:
"Al hablar del instrumento
me dirijo al guitarrón,
con su alambre y su bordón
su sonoro es un portento.
Cinco ordenanzas le cuento
tres de a cinco, dos de a tres,
del clavijero a sus pies
su entrastadura elegante,
cuatro diablitos cantantes
debe su caja tener"